En Carnicería Vicente Gijón nos gusta sorprenderos y descubriros un gran mundo de posibilidades culinarias relacionadas con las carnes y sus derivados, por eso hoy queremos hablaros de los maridajes o uniones perfectas entre la cerveza y los diferentes tipos de carne. Si sois amantes de carne, el embutido o la cocina y además os encanta la cerveza, esperamos que a través de esta lectura podáis unir todas vuestras pasiones.
La cerveza acompaña al ser humano desde aproximadamente el siglo cuarto antes de Cristo. Sus primeros elaboradores fueron los pueblos Elamitas, Egipcios y Sumerios. Esta bebida alcohólica ha llegado hasta nuestros días, convirtiéndose en un elemento más de nuestra gastronomía y ocio, ampliando su variedad hasta límites no definidos hoy en día. Esto ha convertido a la cerveza en un elemento muy importante como acompañamiento de distintos platos. Aunque sus uniones no son universales, el repertorio es amplio y sabroso.
A la hora de elegir el tipo de cerveza con el que acompañaremos nuestras carnes, lo mejor es saber con qué especias, condimentos o salsas vamos a enriquecer nuestro plato, para así hacer la elección del maridaje perfecto para cada concreta ocasión. Las cervezas ligeras encuentran un mayor grado de afinidad con casi todo tipo de platos. Cuanto más fuerte sea el sazonado del plato y siempre que no sea muy picante, se escogerán cervezas más oscuras y de mayor cuerpo.
Carnes de cerdo
El contenido graso de las carnes de cerdo, hace necesario acompañar los platos con una bebida para «limpiar»la boca, sin anular sus sutiles aromas y matices y así disfrutar de cada bocado como si fuera el primero. Este maridaje explica la tradición existente en Europa de acompañar las carnes de cerdo con cerveza. Esta carne tan jugosa y de sabores suaves, necesita de un acompañamiento igualmente suave en sabor y moderado en alcohol, como el que proporcionan algunas cervezas. Las carnes de cerdo combinan muy bien con las cervezas claras estilo lager o pilsen.
Los embutidos
Nos abren un universo de sabores que se desdobla en mil especialidades y tipos diferentes de elaboración. En este caso particular, es difícil probar todas las combinaciones posibles para establecer los mejores maridajes con la cerveza. Las cervezas de cierto cuerpo armonizan bien con los embutidos cocidos y ahumados (butifarras, morcillas, salchichas tipo frankfurt, bacon, etc.) y algo peor con los embutidos de curación natural como el jamón, el lomo y los salchichones. Sin embargo, resulta muy acertada su armonía con el chorizo, cosa que a sorprendido a todos los expertos.
Carne de vaca y buey
Las carnes rojas hechas a la brasa, armonizan muy bien con la cerveza, más concretamente ligan bien con las cervezas rubias, ligeras y suaves. Por otro lado la carne de buey casa estupendamente con cervezas tipo lager doradas y en ocasiones con algunas de tipo ale.
Carne de cordero
Respecto al cordero, no se han unificados todas las opiniones de los especialistas en maridajes. Si bien es cierto, coinciden en señalar que la cerveza apropiada dependerá del tipo de elaboración que le demos al plato. Si nos decantamos por una preparación muy especiada y de sabores potentes, la cerveza se convertirá en nuestra mejor aliada. El cordero tiene una carne grasa y de gusto particular, sobresaliente siempre por encima de todos los aliños y aromas que se añadan. En este caso las carnes de cordero maridan muy bien con cervezas tipo lager.
Estos son sólo algunas recomendaciones para unir cervezas y carnes de la más alta calidad, pero os animamos a que hagáis vuestros propios experimentos culinarios y nos hagáis saber qué tal ha sido el resultado. Quizá, en alguno de vuestros experimentos esté la nueva receta que revolucionara el mundo de la gastronomía y los maridajes o como mínimo os encaminará hacia lo más alto del podio gastronómico de vuestra familia y grupo de amigos.