Si algo es característico de Asturias es la gastronomía y la calidad de sus productos. En este caso os hablamos de los embutidos asturianos. La climatología y las características de la región otorgan al embutido un sabor muy característico, intenso y con toques de leña. En cada concejo y cada pueblo, se preparan embutidos diferentes, siguiendo técnicas guardadas en la memoria familiar e implementando nuevas técnicas, para conseguir productos sin los que muchos no podríamos vivir. A continuación os dejamos un listado con algunos de los embutidos de Asturias que no te puedes perder si vienes de visita. Recuerda que en nuestra carnicería puedes adquirirlos para disfrutarlos cuando quieras en tu propia casa.
1. Chorizo y morcilla asturianos
Existe un par de embutidos asturianos conocidos en todo el territorio nacional. Se trata del chorizo y la morcilla asturianos, ambos pertenecientes a una marca de calidad y reconocidos por estar estrechamente ligado al plato estrella del Principado de Asturias: la fabada. Ambos, junto a la panceta, componen el famoso compango que aporta un sabor único a la fabada. En su composición normalmente se encuentra magro de cerdo, tocino, pimentón dulce, ajo y sal.
2. Longaniza de Avilés
La longaniza de Avilés es quizás la tercera en cuanto a importancia y reconocimiento. La Longaniza de Avilés es una marca registrada de Embutidos Vallina.Es un embutido en intestino delgado de cerdo que no se enchoriza, lo que hace que su conformación sea más alargada que el chorizo. En los años 70 un trabajador alemán se incorporó a la plantilla de Embutidos Vallina, y fue quién introdujo la preparación del producto, combinándolo con las técnicas tradicionales asturianas. Hoy en día este embutido se ha convertido en seña de identidad de la ciudad. Se suele degustar cocida o frita y acompañada de patatas en cachelos.
3. Chosco de Tineo
El chosco de Tineo es un embutido típico del occidente interior asturiano. Cuenta con la denominación de origen IGP. Se prepara con la cabecera de lomo y la lengua troceadas, adobadas con pimentón, sal y ajo, embutidas en el intestino del animal. La mejor forma de degustarlo es cortándolo en rodajas finas y acompañándolo con un buen vino de la zona.
4. Chorizo sabadiego
El chorizo sabadiego de Asturias es un embutido negro que en las matanzas tradicionales se elaboraba el último día con los restos derivados de todo el proceso. De ahí que fuera un chorizo que incluía casquería, así como sangre y cebolla sobrantes del proceso de elaboración de las morcillas. Hoy se prepara con carne de gran calidad. Es natural y elaborado en la zona de Noreña (Asturias), lugar que le ha concedido la oportunidad de ser conocido como un alimento único.
5. Butiello
Embutido típico del suroccidente de Asturias, compuesto de espinazo de cerdo ahumado con leña de Roble natural y adobado solo con pimentón, ajo y sal, tal y como hacían nuestros antepasados, del modo más tradicional. Se caracteriza por un color rojo muy intenso gracias al pimentón y su textura es poco uniforme con muchas hebras pero muy jugosa en la boca. Su aroma a embutido ahumado y al adobo utilizado es muy intenso y una vez cocinado, ese aroma se confunde con el de las especias naturales y el magro. Un auténtico placer para los sentidos tanto crudo como cocinado.
6. Morcilla matachana
Si bien este embutido no es del todo asturiano (su preparación tradicional proviene de León), lo cierto es que en Asturias esta morcilla se consume muchísimo. Está en el menú de la mayoría de las sidrerías. Es un poco fuerte pero riquísima. La manera tradicional de desgutarla es extendiéndola en una tosta de pan, ya que cuenta con una textura suave, apropiada para untar.
Si te quedas con las ganas de probar estos deliciosos embutidos de Asturias, no dudes en visitar nuestra carnicería en Gijón. Ponemos a tu diposición productos tradicionales de la mejor calidad y al mejor precio.